El crecimiento salarial en Australia se eleva mientras el RBA señala una pausa prolongada.
El crecimiento salarial anual de Australia se mantuvo elevado el trimestre pasado, lo que subraya un mercado laboral ajustado y una productividad persistentemente débil, y sugiere que las presiones inflacionistas pueden tardar en moderarse, lo que supone un desafío para los responsables políticos.
El crecimiento salarial anual de Australia se mantuvo elevado el trimestre pasado, lo que subraya un mercado laboral ajustado y una productividad persistentemente débil, y sugiere que las presiones inflacionistas pueden tardar en moderarse, lo que supone un desafío para los responsables políticos.
El Índice de Precios Salariales avanzó un 3,4% anual en el trimestre que finalizó en septiembre, en línea con las estimaciones de los economistas, según datos publicados el miércoles por la Oficina Australiana de Estadística. Trimestralmente, los salarios crecieron un 0,8%. El informe mostró que el crecimiento salarial en el sector público fue superior al del sector privado.
Estos datos se dan a conocer en un momento en que el Banco de la Reserva se mantiene cauto y dependiente de los datos, tras haber reducido los costes de endeudamiento tres veces este año hasta el 3,6%, el nivel más bajo desde abril de 2023. Su atención se centra ahora en el alcance probable de nuevas reducciones, dado un mercado laboral aún ajustado y un escaso crecimiento de la productividad.
El Banco de la Reserva de Australia (RBA) está vigilando de cerca la fijación de precios por parte de las empresas, dado que la tasa de desempleo se encuentra cerca de mínimos históricos, la inflación muestra signos de recuperación y el gasto de los consumidores es mayor de lo previsto. Esto ha llevado a la gobernadora Michele Bullock a indicar que es improbable que se produzcan nuevas medidas de flexibilización monetaria a corto plazo.
Los precios del mercado monetario sugieren que hay pocas probabilidades de otro recorte de tipos el año que viene, mientras que los economistas esperan mayoritariamente que la relajación monetaria se reanude en mayo.
El banco central pronosticó el martes que el desempleo aumentará ligeramente y se mantendrá en el 4,4% durante su horizonte de previsión, mientras que el crecimiento salarial se moderará hasta el 3% el próximo año.
Los economistas creen que un crecimiento salarial de alrededor del 3% es coherente con que el banco central cumpla su objetivo de inflación del 2-3%, dado el débil crecimiento de la productividad.
Bullock ya había declarado que la junta necesita observar una mayor productividad para poder aumentar los salarios sin reavivar las presiones inflacionistas. El gobierno es consciente de ello y está trabajando para generar ideas que impulsen la eficiencia de la economía.
Los datos del miércoles mostraron que el crecimiento salarial anual del sector privado fue del 0,7%, mientras que el del sector público aumentó un 0,9%.


